Testimonio Misionero
“Proclama mi alma la grandeza del Señor…” ¡Hola a Todos! Mi nombre es Fabiola Torres Rivera y tengo el privilegio de pertenecer a la JMV de Puerto Rico. El año pasado, Papá Dios y nuestra Madre me dieron el mejor de los regalos: poder misionar por séptima ocasión en la República Dominicana. Cada viaje misionero es único. Es mucho lo que se comparte, lo que se aprende y son muchas las oportunidades para crecer, para amar y para como jóvenes ir descubriendo más y más el plan de Dios para nuestras vidas. Durante este viaje misionero pude volver a visitar La Casa Rosada, un hogar para niños con VIH a cargo de las Hijas de la Caridad, en la República Dominicana. También pude compartir con niños en orfanatos, en un centro de nutrición y en barriadas muy pobres. Hace un tiempo durante uno de mis viajes misioneros descubrí que una de las cosas más importantes y efectivas al servir a nuestros hermanos es el tratar de dar seguimie